La vida de Regina Ashton, la exquisita sobrina de Edward y Charlotte Malory, cambia para siempre la noche en que es secuestrada en una oscura calle de Londres por Nicholas Eden, un arrogante seductor cuyo pasado alberga un doloroso secreto. Unidos por la vergüenza, el escándalo y una pasión inesperada y abrasadora, Reggie y Nicholas tardarán en comprender y aceptar lo que el destino les ha reservado: amar una sola vez en la vida.
Corría el año 1985 y aquella joven ama de casa que hacía ocho años que se iniciaba en la literatura y en los porros decidió dejar el vicio y probar que era capaz de hacer algo mejor que La novia cautiva y sin necesidad de drogas. Así empezó la afamada saga de los Malory.
La verdad es que no sabía qué esperar de esta novela. De la saga había oído maravillas, sobre todo de las tres primeras entregas, pero ya se sabe que eso de los gustos es algo muy personal. Con Johanna Lindsey había tenido todo tipo de experiencias en las tres novelas suyas que había leído: el desastre absoluto (La novia cautiva), la coña marinera de la que una no sabe qué pensar (La mujer del guerrero) y el calorreo agradable con highlanders de por medio (Una dulce enemistad). Ninguna me había dejado con ganas de más y alguna hasta me puso de los nervios y echando pestes.
Pero los Malory me reclamaban, y más si Kim me ponía en bandeja y en libro físico Amar una sola vez. Había que leerla sí o sí, ya no me libraba de volver a esta autora clásica del romance.
Aunque con esta historia Johanna no ha descubierto nada nuevo, al menos no es para tirarse de los pelos (o para ir a quemarla a ella directamente). La familia Malory mola, los tíos de Regina, la protagonista, te caen bien por la manera que tiene de presentarlos, sobre todo James y Anthony-Tony, cuyas novelas van a caer próximamente. La autora se monta toda una galería de personajes masculinos bastante atractivos por ser canallas, chulescos, apasionados... En medio de todos ellos está la citada Regina, la sobrina mimada de todos estos señores, hija de la única hermana que los Malory tuvieron, así que ha sido criada en un ambiente masculino y lleno de simpáticas rencillas entre los varones Malory.
Cuando empecé a leer, temía que Regina pasara de ser una chica con determinación, decidida y con las ideas claras, a convertirse en una Pichote, como ocurría en La novia cautiva. Pero gracias a Dios no es así. Reggie tiene un par, donde pone el ojo pone el ovario y, harta de que ningún pretendiente sea digno de ella según sus tíos, se fija en el hombre más calavera del momento. Su primer encuentro no puede ser más extraño y eso a ella le divierte y es capaz de poner a Nicholas Eden, el susodicho calavera, nervioso perdido. ¡Bien!
A Reggie le mola Nicholas porque le recuerda a su tío Tony, el preferido de la chica y también nuestro, no nos vamos a engañar. La verdad es que hay un poco de complejo de Electra en la relación de la protagonista con su tío, una admiración que a veces me resultaba un tanto extraña, pero supongo que es comprensible porque no se llevan tantos años y son en ocasiones más amigos que tío y sobrina.
El desarrollo de la trama no está mal, hay algún giro que te sorprende, pero Nicholas peca de demasiado cabezón, como suele pasar en estas historias. Que eso de explicarse aquí nada, mejor nos callamos, nos comemos nuestras razones para ir de duros y ya. Ains, qué complicados son los hombres, para que luego digan de nosotras. Reggie es mucho más lanzada y echada hacia adelante, más franca y más abierta de mente (y no digamos de otras cosas, perdón por el chiste malo), así que se tiran su buen rato de pelea en pelea. Pero bueno, se lee bien y ya es bastante, que con La novia cautiva estaba que me explotaba la vena del cuello.
¿Qué es, en resumen, lo mejor del libro? Conocer a los Malory, concretamente a Tony y a James, que prometen mucho (los otros dos hermanos son más formales), además del calorreíllo, las enaguas, las normas sociales que se rompen... Todas esas cosas clásicas, típicas y tópicas que aquí están bien explotadas sin ser una cosa tampoco de matarse.
Pero me dejo lo mejor para el final: fiel a su estilo, Johanna vuelve a ponernos un buen ejemplo de cómo no respetar el sueño ajeno. Y aquí riza el rizo, señoras y señores. Es algo entre la simulación, el que sí que no... ¡y lo maternal! Hala, a darle vueltas a vuestras retorcidas mentes, jejeje...
Por todo esto obtiene en nuestro Gandymetro...
Niños y niñas, haced caso al señor Mackey |
La verdad es que no sabía qué esperar de esta novela. De la saga había oído maravillas, sobre todo de las tres primeras entregas, pero ya se sabe que eso de los gustos es algo muy personal. Con Johanna Lindsey había tenido todo tipo de experiencias en las tres novelas suyas que había leído: el desastre absoluto (La novia cautiva), la coña marinera de la que una no sabe qué pensar (La mujer del guerrero) y el calorreo agradable con highlanders de por medio (Una dulce enemistad). Ninguna me había dejado con ganas de más y alguna hasta me puso de los nervios y echando pestes.
Bueno, más que papeles, el kindelito y este blog |
Pero los Malory me reclamaban, y más si Kim me ponía en bandeja y en libro físico Amar una sola vez. Había que leerla sí o sí, ya no me libraba de volver a esta autora clásica del romance.
¡Que te leas a los puñeteros Malory, Cassie! |
Aunque con esta historia Johanna no ha descubierto nada nuevo, al menos no es para tirarse de los pelos (o para ir a quemarla a ella directamente). La familia Malory mola, los tíos de Regina, la protagonista, te caen bien por la manera que tiene de presentarlos, sobre todo James y Anthony-Tony, cuyas novelas van a caer próximamente. La autora se monta toda una galería de personajes masculinos bastante atractivos por ser canallas, chulescos, apasionados... En medio de todos ellos está la citada Regina, la sobrina mimada de todos estos señores, hija de la única hermana que los Malory tuvieron, así que ha sido criada en un ambiente masculino y lleno de simpáticas rencillas entre los varones Malory.
Ya pongo paz yo entre los Malory Brothers, no os preocupéis |
Cuando empecé a leer, temía que Regina pasara de ser una chica con determinación, decidida y con las ideas claras, a convertirse en una Pichote, como ocurría en La novia cautiva. Pero gracias a Dios no es así. Reggie tiene un par, donde pone el ojo pone el ovario y, harta de que ningún pretendiente sea digno de ella según sus tíos, se fija en el hombre más calavera del momento. Su primer encuentro no puede ser más extraño y eso a ella le divierte y es capaz de poner a Nicholas Eden, el susodicho calavera, nervioso perdido. ¡Bien!
Reggie es una haggard: apunta, dispara y no falla |
A Reggie le mola Nicholas porque le recuerda a su tío Tony, el preferido de la chica y también nuestro, no nos vamos a engañar. La verdad es que hay un poco de complejo de Electra en la relación de la protagonista con su tío, una admiración que a veces me resultaba un tanto extraña, pero supongo que es comprensible porque no se llevan tantos años y son en ocasiones más amigos que tío y sobrina.
Mmmm... Mucho te mola a ti tu tito, chata |
El desarrollo de la trama no está mal, hay algún giro que te sorprende, pero Nicholas peca de demasiado cabezón, como suele pasar en estas historias. Que eso de explicarse aquí nada, mejor nos callamos, nos comemos nuestras razones para ir de duros y ya. Ains, qué complicados son los hombres, para que luego digan de nosotras. Reggie es mucho más lanzada y echada hacia adelante, más franca y más abierta de mente (y no digamos de otras cosas, perdón por el chiste malo), así que se tiran su buen rato de pelea en pelea. Pero bueno, se lee bien y ya es bastante, que con La novia cautiva estaba que me explotaba la vena del cuello.
¿Qué es, en resumen, lo mejor del libro? Conocer a los Malory, concretamente a Tony y a James, que prometen mucho (los otros dos hermanos son más formales), además del calorreíllo, las enaguas, las normas sociales que se rompen... Todas esas cosas clásicas, típicas y tópicas que aquí están bien explotadas sin ser una cosa tampoco de matarse.
Tony, tú eres el próximo Malory en mi lista |
Por todo esto obtiene en nuestro Gandymetro...
Nicholas, no sabes en qué familia te has metido... |
XDDDDDDDDD Soy tan sutil a la hora de obligarte a leer... XDDDDDDDD
ResponderEliminarHe hecho salto de longitud en tu reseña, ya lo sabes, pero por las cosas que me has ido comentando obviamente tengo que presentar mis respetos a esta maravillosa familia. Ois, qué dura esta vida nuestra...
Besotes!!! Ya te comento propiamente cuando lea el libro!
No es la maravilla, pero se pasa un ratico bueno que es lo mínimo que pido a estas novelas.
EliminarSaludos chicas; amo su blog, tanto así que en tres días he leido todas las reseñas
ResponderEliminarSigan así :) Besos desde Panamá
¡Madre mía, eso tiene mérito! ¡Muchas gracias y bienvenida!
EliminarMe encanta vuestro blog y vuestras reseñas, en serio, no he parado de reír. Verdades como templos, gifs y un Gandymetro ¿qué más puedo pedir?
ResponderEliminarVeo que te has animado con un clásico de RA, yo en su día le di un 2 y es que no me termino de acostumbrar a los clásicos de este género. Me parece que tienes pocas reseñas novelas románticas histórica del oeste, te recomiendo Salvaje de Nicole Jordan, mi preferida de este género.
Un abrazo muy fuerte, seguid así chicas ;)
Gracias por comentar :) A Johanna hay que leerla como lo que es, aunque la de "La novia cautiva" me pareció ya demasiado. Apunto la recomendación :)
Eliminarque arte,jajaja Oye no pinta nada mal,eh?? Buen post!!!!mi lista no para de engordar
ResponderEliminarAy Los Malory ♥.♥ no soy muy objetiva, con estos libros comencé a leer romántica histórica y les tengo mucho cariñín :) No son una obra de arte pero se pasa moemntos muy divertidos y entretienen sin romperse los sesos.
ResponderEliminarAnthony y James son the very best del mundo mundial, vamos los libros sin estos dos no serían lo mismo.
Haciendo memoria... creo que hasta el cuarto te van a gustar después... tengo que recordar mucho para no dejarme llevar por mis ñoños sentimientos, así que paso de decirte nada, ya me dirás tú XDD
Deseando estoy que termines con Tony =D
Muuuuuaks ;-******
¡Hola!
ResponderEliminarCon vuestra forma de reseñar (la cual me ha encantado), convencéis a cualquiera de darle una oportunidad a la saga. La tenía apuntada desde hace tiempo, pero a la vez la tenía un poco olvidada. Ahora la pongo en "preferente". xDD
Me quedo por el blog. Si os apetece, os invito a conocer el mío.
Un beso.
Andrea-
@Waldorf_Petrova
Ale, ya he empezado con los Malory, viva!!!!! Coincido contigo en todo lo que dices en tu genial reseña. Ella MO-LA, Tony y James MO-LAN MU-CHO-AJHFAJKHFJKAHFAJSD. Y Nicholas, pichote (que tampoco está mal que lo sea él alguna vez).
ResponderEliminarLa verdad es que me he quedado un poco ni fu ni fa pero por conocer a los Malory, cualquier cosa!
Besotes guapa!!
Pues si, existen los tíos Pichote XDDDDD La saga va mejorando hasta donde yo he leído. Deseando que llegues a James... ¡Gracias por comentar! :)
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