En vísperas de la Segunda Guerra Mundial, en un tranquilo pueblo de Georgia, Will Parker responde a un anuncio en el que se solicita un marido. Elly Dinsmore es una joven de veintiséis años, viuda y embarazada. Cuando Will aparece, está encantada de tener a un hombre en casa, sin importarle las habladurías. Poco a poco, Will y Elly se van tendiendo mutuamente la mano y van descubriendo una pasión profunda, que ninguno de los dos había sentido jamás.
Creo que ya os he comentado en alguna reseña que, cuando comencé a leer novela romántica, no sabía muy bien qué leer ni tenía una estantería llena de historias de amor heredadas de mi madre ni amigas que me recomendaran y prestaran libros. ¡Pero quién quiere contacto humano cuando tiene internet a mano! Así que caí en All about romance y sus 100 mejores novelas románticas (lista de 2013, por cierto, así que digo yo que toca ir actualizando...) y, ale, a leer y a tachar. La vida lectora me va alejando de ella pero siempre acabo volviendo. Y esta vez regresé a por Maravilla, de LaVyrle Spencer, sin saber nada de ella. MAL. Y BIEN. Ahora os cuento por qué, que no soy ciclotímica.
[Y sí, este libro está también en nuestro fabuloso #RetoRita pero es que yo hice la reseña antes y si aprovecho las sobras del cocido para hacer croquetas, no iba a dejar de aprovechar una reseña que ya tenía hecha para inaugurar las reseñas del reto 😁😆]
Hagamos un retrospecter histórico y vayamos a 1941. Will Parker es un hombre sin futuro debido a un pasado complicado. Dando tumbos por la vida desde que puede recordar, pasó una temporada en la cárcel y eso le impide ahora integrarse en la sociedad (reintegrarse no porque nunca estuvo dentro de ella). Acaba cayendo en Whitney, un pueblecito de Georgia, donde tampoco encuentra su sitio. Pero, por azares del destino, en una cafetería va a encontrar varias cosas que van a marcar su futuro: una camarera porculera llamada Lula y un anuncio en el periódico de una mujer que busca marido. A Will, que huele en Lula la palabra "problemas", le llama la atención ese anuncio y se acerca a casa de la loca Eleanor Dinsmore, a ver si le puede valer. Pero Elly Dinsmore no es para nada lo que él espera, porque no es la loca de los gatos de Los Simpsons (y es que no la llaman loca por vivir aislada y buscar marido sino por otra cosa que... ¡ARG!) sino una chica joven fea, desarreglada y algo huraña, con dos hijos y embarazada.
Y es que Eleanor Dinsmore ha crecido aislada de la sociedad por obra y gracia de su familia (que sí que estaba como las maracas de Machín -loca perdida-) y, al quedarse viuda, no sabe cómo sacar adelante su granja y a sus hijos sin un hombre a su lado. Pero antes muerta que relacionarse para encontrar otro hombre, por lo que pone el anuncio. Will tampoco es lo que esperaba (bueno, tampoco es que esperara a alguien) pero ve rápidamente el buen hombre que se esconde bajo esa apariencia flacucha y oculta bajo su sombrero de cowboy. Así que Elly y Will se observan y pronto descubren que son exactamente lo que necesitan, un marido para Elly, un padre para sus hijos y un hombre para su casa, y una vida nueva llena de trabajo y libertad para Will. Y nosotros podemos acompañarlos en esta aventura vital, porque eso justo es este libro, la aventura de la vida para Will y Elly, dos personas rechazadas por la sociedad que, juntas, consiguen salir de su ostracismo y abrirse a la vida y al amor.
He disfrutado mucho con la primera parte del libro, leyendo el acercamiento entre ambos, la adaptación mutua y de Will al pueblo (standing ovation para la señorita Beasley, la bibliotecaria con mala hostia pero mucha inteligencia y gran corazón y cuya relación con Will es sorprendente y muy muy bonita) y a los niños (niños así son AMOR, siendo encantadores y no dando porculis). El camino que recorren Will y Elly es una odisea, Will luchando contra el mundo y Elly luchando contra sí misma. Reconozco que Will me enamoró desde el primer momento, viendo cómo aprecia las pequeñas cosas de la vida, cómo es feliz sabiendo que tiene opciones que puede escoger él porque quiere, cómo disfruta de que Elly le dé una oportunidad. Pero la que sufre la gran transformación es Elly, porque, mientras Will sufre las secuelas y la maldición de la cárcel física, Eleanor sufre las de una cárcel personal de la que le es imposible escapar. Pero cuando el amor llama a tu puerta...
Pues eso, que si el amor llama a tu puerta, se le deja entrar hasta la cocina. Eso sí, aquí no hay fuegos internos encendidos con un mechero, el amor se va fraguando lentamente y es una gozada poder verlo a través de los pensamientos y sentimientos de los personajes, que callan más de lo que hablan y que te ponen de los nervios porque tú estás ahí "pero díselooooooo", "pero tócaleeeeeeeeeeee" y ellos ahí que nada, sintiendo mucho pero con la cara de lechuga. Y cuando se tocan (porque cómo no va a haber refrote, hombre, entonces ya habría sacado yo mi letrero de ESTO NO ES UNA NOVELA ROMÁNTICA), se describen de un modo bonito e intenso los momentos previos y luego, toma unas metáforas y unos pájaros volando y allá te las apañes.
Mi yo guarreril siempre se va a quejar si no lo sacian con momentos muy hot pero la verdad es que aquí no pegan para nada unos intercambios apagafuegos descriptivos porque LaVyrle Spencer tiene un modo muy especial de narrar la historia, con realismo pero con delicadeza y mucho sentimiento, demasiado para mi gusto (con cierto abuso de las repeticiones que, además, me hacían algunas partes muy lentas). Will y Elly son personajes muy de la época, educados y reservados, que sienten mucho pero demuestran poco. Únicamente Lula se sale de este cuquismo. Con ella lo soez alcanza cotas himalayescas.
A partir de la mitad del libro las cosas cambian y, brevemente, la narración también. Hasta entonces alternamos constantemente los puntos de vista de Will y Elly en tercera persona pero hay un acontecimiento muy importante cuyo desarrollo conocemos únicamente a través de cartas que se envían los protagonistas. No me esperaba que esto se contara así y me he encontrado ansiosa leyendo. Una pena que esta parte fuera demasiado corta y que, a partir de ahí, todo se haya desarrollado excesivamente rápido, sobre todo el gran acontecimiento final, que debería haber sido más extenso y menos previsible. Creo que lo que a mí me ha pasado con este libro es que me ha faltado sufrimiento. Y es que ya conocéis mi lema:
Y aquí me he quedado corta. Se puede decir que en este libro pasan pocas cosas y que LaVyrle Spencer no quiere hacer pupita, que bastante ya llevan los protagonistas encima. Aquí vemos el proceso de curación de dos personajes heridos y lo sumamente fácil que puede ser perderlo todo si no se tiene alguien por el que vivir. Es algo precioso de leer pero me esperaba algo que me tocara más la fibra sensible y me llegara hasta el corazoncitoque no tengo. Tal vez si hubiera sabido cómo escribe LaVyrle este libro me hubiera gustado más porque yo no soy muy de sentimientos y cuquismos y en este libro campan a sus anchas. Eso sí, no son excesivos y se agradece. Maravilla es un libro bonito, sutil, algo nadista, emotivo pero, para mí, algo cursi. No es La Gran Historia de Amor que te va a hacer vivir en una montaña rusa pero sí una de las que, poco a poco, te llega y te conquista (o, al menos, te deja con un gran sabor de boca y un buen recuerdo lo que, para mi ranciedad, ya es más que suficiente).
Por todo esto, Maravilla se lleva en nuestro Gandymetro...
Claaaaaaaaaaaaaaaaaaaaro... |
[Y sí, este libro está también en nuestro fabuloso #RetoRita pero es que yo hice la reseña antes y si aprovecho las sobras del cocido para hacer croquetas, no iba a dejar de aprovechar una reseña que ya tenía hecha para inaugurar las reseñas del reto 😁😆]
Hagamos un retrospecter histórico y vayamos a 1941. Will Parker es un hombre sin futuro debido a un pasado complicado. Dando tumbos por la vida desde que puede recordar, pasó una temporada en la cárcel y eso le impide ahora integrarse en la sociedad (reintegrarse no porque nunca estuvo dentro de ella). Acaba cayendo en Whitney, un pueblecito de Georgia, donde tampoco encuentra su sitio. Pero, por azares del destino, en una cafetería va a encontrar varias cosas que van a marcar su futuro: una camarera porculera llamada Lula y un anuncio en el periódico de una mujer que busca marido. A Will, que huele en Lula la palabra "problemas", le llama la atención ese anuncio y se acerca a casa de la loca Eleanor Dinsmore, a ver si le puede valer. Pero Elly Dinsmore no es para nada lo que él espera, porque no es la loca de los gatos de Los Simpsons (y es que no la llaman loca por vivir aislada y buscar marido sino por otra cosa que... ¡ARG!) sino una chica joven fea, desarreglada y algo huraña, con dos hijos y embarazada.
Elly es un Kinder Sorpresa |
Y es que Eleanor Dinsmore ha crecido aislada de la sociedad por obra y gracia de su familia (que sí que estaba como las maracas de Machín -loca perdida-) y, al quedarse viuda, no sabe cómo sacar adelante su granja y a sus hijos sin un hombre a su lado. Pero antes muerta que relacionarse para encontrar otro hombre, por lo que pone el anuncio. Will tampoco es lo que esperaba (bueno, tampoco es que esperara a alguien) pero ve rápidamente el buen hombre que se esconde bajo esa apariencia flacucha y oculta bajo su sombrero de cowboy. Así que Elly y Will se observan y pronto descubren que son exactamente lo que necesitan, un marido para Elly, un padre para sus hijos y un hombre para su casa, y una vida nueva llena de trabajo y libertad para Will. Y nosotros podemos acompañarlos en esta aventura vital, porque eso justo es este libro, la aventura de la vida para Will y Elly, dos personas rechazadas por la sociedad que, juntas, consiguen salir de su ostracismo y abrirse a la vida y al amor.
Estos dos son tan riquiños como yo |
He disfrutado mucho con la primera parte del libro, leyendo el acercamiento entre ambos, la adaptación mutua y de Will al pueblo (standing ovation para la señorita Beasley, la bibliotecaria con mala hostia pero mucha inteligencia y gran corazón y cuya relación con Will es sorprendente y muy muy bonita) y a los niños (niños así son AMOR, siendo encantadores y no dando porculis). El camino que recorren Will y Elly es una odisea, Will luchando contra el mundo y Elly luchando contra sí misma. Reconozco que Will me enamoró desde el primer momento, viendo cómo aprecia las pequeñas cosas de la vida, cómo es feliz sabiendo que tiene opciones que puede escoger él porque quiere, cómo disfruta de que Elly le dé una oportunidad. Pero la que sufre la gran transformación es Elly, porque, mientras Will sufre las secuelas y la maldición de la cárcel física, Eleanor sufre las de una cárcel personal de la que le es imposible escapar. Pero cuando el amor llama a tu puerta...
Amor, AMOR, no Avon |
Pues eso, que si el amor llama a tu puerta, se le deja entrar hasta la cocina. Eso sí, aquí no hay fuegos internos encendidos con un mechero, el amor se va fraguando lentamente y es una gozada poder verlo a través de los pensamientos y sentimientos de los personajes, que callan más de lo que hablan y que te ponen de los nervios porque tú estás ahí "pero díselooooooo", "pero tócaleeeeeeeeeeee" y ellos ahí que nada, sintiendo mucho pero con la cara de lechuga. Y cuando se tocan (porque cómo no va a haber refrote, hombre, entonces ya habría sacado yo mi letrero de ESTO NO ES UNA NOVELA ROMÁNTICA), se describen de un modo bonito e intenso los momentos previos y luego, toma unas metáforas y unos pájaros volando y allá te las apañes.
Mi yo guarreril siempre se va a quejar si no lo sacian con momentos muy hot pero la verdad es que aquí no pegan para nada unos intercambios apagafuegos descriptivos porque LaVyrle Spencer tiene un modo muy especial de narrar la historia, con realismo pero con delicadeza y mucho sentimiento, demasiado para mi gusto (con cierto abuso de las repeticiones que, además, me hacían algunas partes muy lentas). Will y Elly son personajes muy de la época, educados y reservados, que sienten mucho pero demuestran poco. Únicamente Lula se sale de este cuquismo. Con ella lo soez alcanza cotas himalayescas.
Cuquimente te lo decimos |
A partir de la mitad del libro las cosas cambian y, brevemente, la narración también. Hasta entonces alternamos constantemente los puntos de vista de Will y Elly en tercera persona pero hay un acontecimiento muy importante cuyo desarrollo conocemos únicamente a través de cartas que se envían los protagonistas. No me esperaba que esto se contara así y me he encontrado ansiosa leyendo. Una pena que esta parte fuera demasiado corta y que, a partir de ahí, todo se haya desarrollado excesivamente rápido, sobre todo el gran acontecimiento final, que debería haber sido más extenso y menos previsible. Creo que lo que a mí me ha pasado con este libro es que me ha faltado sufrimiento. Y es que ya conocéis mi lema:
SUFRO ERGO DISFRUTO
Y tanto disfrute un día me lleva a la tumba
Y aquí me he quedado corta. Se puede decir que en este libro pasan pocas cosas y que LaVyrle Spencer no quiere hacer pupita, que bastante ya llevan los protagonistas encima. Aquí vemos el proceso de curación de dos personajes heridos y lo sumamente fácil que puede ser perderlo todo si no se tiene alguien por el que vivir. Es algo precioso de leer pero me esperaba algo que me tocara más la fibra sensible y me llegara hasta el corazoncito
Por todo esto, Maravilla se lleva en nuestro Gandymetro...
3'5. Will, déjame ser tu panal de rica miel |
Hola!
ResponderEliminarPues creo que lo mismo este libro es demasiado lindo para mi, necesito sufrimiento y todo eso xD
Una reseña genial!
Besotes!
Sí, efectivamente es una gran descripción, "un libro lindo". Aunque nunca se sabe, tal vez tú lo leas y lo disfrutes más que yo!
EliminarGracias por pasarte!
Andaaaaaaa este si lo he leído ya y no hace mucho para empezar el reto Rita, a mi me encantó, lo disfrute mucho, Will me encantó y los niños son muy cuquis, ella tiene momentos jajaja pero también me gustó como personaje!!! buen post
ResponderEliminarLos niños son un encanto! Y mira que diga yo eso, que salen en los libros y me da sarpullido...
EliminarMuchas gracias por comentar, guapa!
Es la primera novela que leo de esta autora, la verdad para mí es una historia muy bonita, para leerla con calma, no porque sea complicada, pero tiene personajes tan reales, con comportamientos y actitudes, acorde a la época, will te va a gustar si o si y con unos niños que te roban el corazón, si tienen tiempo denle una oportunidad :D Genial la reseña, gracias.
ResponderEliminarSí, Will es un personaje que te conquista, es un amor por completo. Merece la pena leerla, aunque a mí el estilo de la escritora no me haya gustado tanto.
EliminarMuchas gracias por pasarte!
Muy buena reseña, as always, Kim. Estoy totalmente de acuerdo. Es una novela que se lee con agrado, sus personajes se comportan como deben según la época. Pero a mí no me ha dejado una huella especial, le falta "algo", no sé. Un teleflín que entretiene. Pero Will es Will, eso sí. ¡Un besote!
ResponderEliminarTienes toda la razón, querida. Me gusta que la gente disfrute tanto con este libro aunque me jode más que a mí no me haya pasado. Al menos con Will no se pasa mal rato.
EliminarBesotes!!!
Oh, yo ésta no la he leído, pero quién sabe si un día de éstos cae, que no tiene mala pinta y me gusta cómo escribe esta mujer, con tanto sentimiento. De ella sólo he leído ''Los dulces años'', que me pareció preciosa y os recomiendo.
ResponderEliminarPD: Y aunque no tenga nada que ver, y por si queréis leer a alguna otra autora con un estilo parecido, os recomiendo ''El sabor del cielo'' de Alexis Harrington, que leí hace poco y me enamoró, aunque lamentablemente sólo está disponible en ebook.
¡Estupenda la reseña! Besos.
Apuntados quedan los dos libros que nos comentas! Muchas gracias!!
EliminarA ver doña Croqueta XDDD bueno, bueno, 3'5 Gandys... no está mal podría ser peor que hay algún viejunismo del #RetoRita que puede provocar daños irreparables.... juas! XDDDDDD
ResponderEliminarMenos mal que una de las dos ya empezó el reto porque yo voy a tener que hacer #MaratónRita XDDDD
Muuuaks ;-****
Tía, te contesto un mes tarde pero espero que ya hayas empezado el Reto! Que lo has creado tú!!! Qué poca vergüenza XDDDDDD
EliminarHola Kim, fantástica reseña. En mi caso, a mi me dejo impactada y me llego profundamente. Es cierto que es muy cuqui (y ciertamente no soy de lo cuqui mucho) pero en ésta ocasión no me chafó, sino que no lo percibí como tal. Todos los personajes son extraordinarios, la señorita Beasley me ha recordado a aquellas super maestras de EGB, que eran duras, pero que al final, y con el paso del tiempo, son de la que te acuerdas. Los niños son entrañables pero sobre todo, tanto Elly y Will, son de los mejores personajes que he leído. Me enamoré de los dos. Gracias por poner este libro en Retorita, ha sido un gusto poder leerlo. Besote enorme
ResponderEliminarMe alegro mucho de que hayas disfrutado tantísimo de este libro, yo tenía muchas ganas de leerlo y ha sido un pequeño chasco que no me haya emocionado tanto. En cualquier caso ha sido una buena lectura y me alegro de haberlo leído.
EliminarMuchas gracias por pasarte y comentar!
Hola!!
ResponderEliminarLo leí hace unos años y sí, la historia es preciosa, tal como el título traducido.... disfruté mucho de Will y pero, también admito que no he vuelto a leer nada de esta autora, quizás porqye, en mi opinión, abusa de la descripción y le da lentitud al ritmo de la novela... será que soy ansiosa por naturaleza y me gusta la agilidad jajaja
Un besote
A mí me pasó justo eso con este libro, tanta descripción me enlenteció demasiado el libro y, para mí, lo perjudica, pero la historia es bonita y se pasa bien el rato.
EliminarMuchas gracias por pasarte y comentar!
¡Hola! Uff, tu reseña es tan completa que me encanta. Haces que a uno le de muchas ganas de leer el libro y ver qué pasa, y eso haré. Me lo llevó apuntadito porque me parece atractivo, quizás y tenga una opinión similar a la tuya, pero, por parte de lo sentimental me parece lindo.
ResponderEliminarPor cierto, te he nominado en un premio y bokktag, ojalá te animes a checarlo.
https://karimemendoza.blogspot.mx/2017/02/best-blog-award-book-tag.html?m=1
Un beso, nos seguimos leyendo.
Me alegro de que te hayan dado ganas de leerlo!! (Ahora me paso a ver tu booktag :) )
EliminarMuchas gracias por pasarte!
Terminado. Me estaba gustando mucho, es como dices, super cuqui, pero ese final... El libro es una maravilla, eso sí.
ResponderEliminarBesos! A por el siguiente del #RetoRita :3
Ais, ese final que se carga algunas cosas... Bueno, al menos lo has leído y sigues con el #RetoRita, viva viva!!!
EliminarMuchas gracias por pasarte a comentar!!!
La reseña a estado genial, primera vez que te leo y me ha encantado.
ResponderEliminarGracias!
A mí me encanta este libro, pero eres muy acertada en las críticas que haces de él. Pero si te gusta sufrir, en realidad este es de los libros más suaves de la autora, normalmente son unos dramas terribles que te hacen llorar!! No la pierdas de vista! Un abrazo
ResponderEliminarPerdón que discrepe, es la segunda vez que lo leo y me ha gustado más que la primera. Este libro me ha estremecido y he llorado y he reído con los personajes en partes iguales.
ResponderEliminarEso sí, creo que todo libro tiene su momento y este llegó nuevamente a mis manos cuando más necesitaba regodearme en una buena historia de amor y de superación.
Saludos
Toda opinión es bienvenida por aquí! Me alegro mucho de que hayas disfrutado la relectura, es una gozada cuando pasan esas cosas y un libro es capaz de emocionarte tanto. Conmigo, desafortunadamente, no lo logró, pero el año pasado tuve la oportunidad de leer otro libro de ella, Juegos de azar, que me encantó. De hecho, dedicamos un mes entero a esta escritora y tenemos un post recopilatorio sobre bastantes de sus libros, por si quieres buscarlo por el blog.
EliminarMuchas gracias por leernos y dejar un comentario!!