Inconsciente (Serie Inconsciente 1), S.C. Stephens

En los dos años que lleva de novia de Denny, Kiera cree que ha encontrado al hombre que siempre ha deseado. Cuando los dos se mudan a una nueva ciudad para empezar a vivir juntos, donde Denny encontrará el trabajo de sus sueños y ella se inscribirá en una universidad de alto nivel, todo parece perfecto. Hasta que un imprevisto obliga a la pareja a separarse temporalmente. Kiera se siente confundida, necesitada de afecto, y lo busca en el lugar más inesperado: Kellan Kyle, estrella local de rock y amigo de Denny. Al principio, él se comporta como un amigo que puede reconfortarla, pero a medida que la soledad de Kiera crece, su relación con Kellan se vuelve cada vez más profunda. De pronto, una noche, todo cambia, y ninguno volverá jamás a ser el mismo. Ahora Kiera debe elegir entre el amor que siente por Denny y la pasión arrebatadora que le promete Kellan.

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Puede que no lo sepáis porque siempre soy jovial y visto trendy y le doy al Whatsapp a la velocidad de la luz, pero una ya va para viejuna sabia (snif snif). Es lo que hay, por mucho que yo no quiera y que mis tetas aún no hayan cedido a la gravedad. Yo busco (lecturas con) hombres de pelo en pecho y vida complicada y boa resabiá. Por eso cuando las chicas del Sweet Addiction Bookclub me recomendaron este libro pensé que si se habían fumado el humo rojo de los vampiros de la Ward.

¿Estáis seguras? ¿De verdad?

Pues nada, tras un breve googleo para ver que NA era lo que yo pensaba (New Adult) y no No Abrir, me salté la sinopsis con mi temeridad habitual y me puse a leer la historia de Kiera y Kellan.
Kiera Allen tiene un novio australiano, Denny, que es lo más adorable del mundo y lo mejor del universo que se va a Seattle a currar y ella, que sabe que con él se van los polvos y los arrumacos, se cambia de universidad, echa sus mochilas al coche y se larga con él a vivir juntitos e iniciar su nueva etapa de vivir independiente y con novio y follar a todas horas. Denny tiene un amigo en Seattle, Kellan Kyle, que les va a alquilar una habitación de su piso. Kellan, además, es el cantante de un grupo llamado los D-Bags. Ah, un pequeño detalle que se me olvidaba comentar, Kellan Kyle está hipersupermegaextrabueno, de untarlo en el pan y comerlo como si... ¡Qué coñio! ¡Que se unte él el paté y ya comes tú lo que haya que comer!

Ven p'acá, nene

Kiera está muy enamorada de Denny pero vive tú con Kellan y dime si no eres capaz de sentir picores hasta en el carnet de conducir... ¿Necesitáis que os cuente algo más del argumento? No, ¿verdad? Ya tenemos el pisto hecho con esos tres ingredientes tan sencillos. Esta novela no engaña a nadie desde el principio, esto es un triángulo amoroso y ya. Claro que cada uno arrastra su vida y todo eso, pero aquí de lo que se trata es de que Kiera tiene un novio al que quiere y se enamora de otro que es su compañero de piso y, casualmente, muy amigo de su chico. ¿Qué pasará? ¿Con quién se quedará? Chan chan chaaaaaaaaan... (se supone que es música de misterio e.e)
"Inconsciente" viene a ser una mezcla entre "Bésame Licia" (con su grupo musical y su chica normalita)...

De aquí cogieron el momento "hostión"

...y "Marmalade Boy" (con su triángulo amoroso...

Os vamos a sacar de quicio

...y su chica "tontaloshuevos" -Pichote, en nuestro mundo haggardiano-).

Sí, ríete de mí pero me follo a tíos más buenos que tú

Inconsciente tuve que estar yo cuando me puse a leer este libro. Las cosas claras desde el principio, queridas lectoras, tiene la profundidad psicológica de un mejillón (que si son muy listos, mejor para ellos, pero a mí me viene bien para la reseña que sean más bien justitos). Podríamos enclavar su trama en el nadismo absoluto: no pasa nada. Me refiero a las tramas a que estamos acostumbradas a leer por aquí, de amores intensos con problemones de la vida y traumas. 

"¡Que Kellan sí tiene traumas! ¡Que te olvidas, loca!"

[No me olvido, Leo, querido, es que no lo he querido mencionar porque no me ha dado la gana. ¡A callar, que te explota un abdominal del cabreo!]
Aquí todo es muy de manga amoroso, de mucho sentimiento, dudas amorosas, llantos, mundos que explotan... Le faltan las flores de cerezo cayendo mientras ella corre y sus lágrimas flotan en los aires invernales. Ah, que no se me olvide comentaros una pequeña cosa. También le faltan a la novela unas mil quinientas hostias por minuto, todas las que se merece Kiera. Esta chica consigue crisparte los nervios poco a poco hasta que sientes ganas de hacerle tragar las páginas en las que se sonroja, le duele el estómago y, mis favoritas, las páginas en las que llora. Primer personaje que veo que tiene un buenorraco a mano y se deshidrata más por las lágrimas que por los bajos, IYKWIM.

Dos maromos tengo pa chingar, aaaaaay, qué penaaaaaaaa

Sí, chica, eres muy insoportable, con tanta indecisión (ahora, para hacer lo que haces con Kellan bien que te pasas las dudas por el forro de tu novio, ejem). Y como la historia nos la cuenta ella, tenemos sobredosis de todo y bien extenso, que nos quede claro que tiene muchas dudas, que sufre mucho y que, ay, puta vida ésta. Tanta intensidad tan extensa cansa, chica, pero tendremos que achacarlo a que eres una veinteañera que acaba de salir de casa y lo vives todo tan intensamente como si estuvieras en "Gran Hermano".
Ignorando a Kiera un rato (¡bien!), tenemos a Denny, alias Mñe. Sí, está entre Mñe y tolili, porque hay que serlo para hacer lo que hace él ("tú pasa rato con el buenorro mientras yo trabajo como un cabrito y te quiero mucho mucho pero en la distancia"). Es un chico guapo majo pero, claro, con horchata en las venas y eclipsado total y absolutamente por Kellan. 

¡Ay, que no le ha gustado nada! ¡Chica, dale al helado!

Eh, un momento, que yo no he dicho eso. Sí hay algo que me ha gustado y es, efectivamente, lo que le gusta a todo el mundo: Kellan Kyle.

Lo sabía, Kim. Te voy a cantar un soneto mientras te la ajkhgdkljhf

Bueno, mejor os voy a poner al de carne y hueso, que tiene el pelo menos a lo Phury.

Que si mefó un rato, Kim

[Voy a ver si aúllo un rato y me doy una ducha fría de paso, grrrrrrr]
Kellan es AJHFAKJHFDKJASHFKJHFKJASHFKJAHKSJHJS ADORAFOLLABLE DE IR A LA LUNA Y VOLVER TRES VECES. Ha quedado claro, ¿no? Es maravilloso por todos los lados y es normal que a Kiera se le haga el xixi Pepsicola porque es imposible que te metas en esta historia y no se te haga a ti. Tiene todo lo que buscas en un maromazo en este tipo de libros, guapo, majo, con pasado traumático, seductor, se enamora de la chica normal, toma café... 

Queridas lectoras, Kellan me ha compensado la lectura de este libro por completo. Los momentos con Kellan son especiales, te hacen feliz, te provocan cosquillitas everywhere, estás deseando levantarte por la mañana y encontrártelo en la cocina, con su café, que te dé un abrazo, que te tome el pelo con su media sonrisilla, que te eche un polvo con olor a café...

Todas tras disfrutar de Kellan

Y ahora es donde os digo un secreto sobre mí: soy géminis. Eso quiere decir que soy una contradicción con patas. ¿Por qué os digo esto? Porque, a pesar de toooooooodo lo que os acabo de contar, he disfrutado este libro y lo he devorado como cuando me zampo una bolsa de patatas fritas en cinco minutos y me siento que te cagas genial después.

Ya ni me intento comprender

Dentro de mí guardo a la Kim adolescente y medio pava, ésa que sigue disfrutando de las series de adolescentes, de "La chica de rosa", de los mangas que te sacan de quicio mientras caen las flores de cerezo. Sé lo que es todo esto pero como dan justo lo que prometen, si los acojo, lo hago pero bien (a ti sí que te a-cogía yo, Kellan, grrrrrrrrr). Será que me ha pillado en una época baja en la que MeCabe todo. Desde un principio quedaba claro que no iba a pasar otra cosa distinta a la historia de amor y yo no esperaba nada más, puede que por eso no me haya decepcionado. Tampoco me ha entusiasmado, ojo, en muchos momentos me ha parecido muy simplón, pero lo he leído con una especie de ansiedad adolescente que me ha sorprendido hasta a mí. Mira que tengo lectura pendiente y a la que le tengo muchas ganas, pero es que me ponía con otro libro y tenía que dejarlo para ver qué pasaba con estos dos. Será que no tenía suficiente Kellan. Será que estoy gagá, yo qué sé, pero a veces necesito una historia de este tipo, que me haga sentir la desesperación del amor sin mirar otros aspectos de la vida, que me haga desconectar de la Kim adulta y me meta en el mundo del sentimiento intenso y sobredimensionado que debía haber tenido hace diez años. Creo que ha quedado muy claro que no tiene nada especial ni está escrita de un modo brillante pero leerlo ha sido un guilty pleasure por completo.

Lo tenías guardadito, Kim, pero...

Pues va a ser que sí

[Chica, es que dame a mí una enagua pero dame una historia de amores jovenzuelos intensos, las valoro en su género pero puedo disfrutar ambas sin que se me mueva el cardado]. 
En fin, queridas, que ya véis qué pisto en mi cabeza tras leer este libro, sufriendo y disfrutando como la adolescente con granos que llevo dentro. Ah, por cierto, antes de que se me olvide. Kiera, querida, eres tan insoportable que no nos ha quedado más remedio que inaugurar contigo el Hostiómetro, maravillosa representación gráfica de lo que nos provocas en base a tu comportamiento exasperante (aplicable a partir de ahora si lo consideramos necesario). Partiendo de que Anastasia "la del Grey" es el top, tú te vas a llevar...

Todas en el mismo moflete

[Creo que es obvio que todo esto del Hostiómetro es pura coña, que estamos en contra de cualquier tipo de violencia y que esta tontuna es una representación gráfica humorística de la insoportabilidad de un personaje, nada más] 
"Inconsciente" no es una novela que me vaya a dejar huella forever and ever, pero tengo que reconocerle el mérito de haberme hecho adicta a su historia y eso es algo que no me lo explico ni yo. Se merece 3 Gandys, no os engaño (y muchas pensaréis -y puede que con razón- que hasta sea generosa), pero a Kellan le tengo que dar más, los Gandys, mi teléfono y mis bragas. Por todo esto, se lleva en el Gandymetro...

Kellan, con diez años más y pechote, te subo un Gandy. Y tefó más aún