Me gusta más el título original |
Gavrael McIllioch había nacido en un clan de guerreros de fuerza sobrenatural, pero abandonó su nombre y su castillo de las Highlands decidido a escapar del sombrío destino de sus antepasados. Ocultando su identidad al implacable clan rival que lo perseguía, pasó a llamarse Grimm para proteger a la gente que le importaba y juró no admitir jamás su amor por la encantadora Jillian St. Clair. Y entonces el padre de Jillian lo convocó con urgencia… ¿Por qué había huido él de ella durante tantos años? ¿Y por qué regresa ahora para verla ofrecida como premio en una competición orquestada por su padre? Furiosa, Jillian había jurado no casarse jamás. Pero Grimm era el hombre al que amaba, y ella la única mujer que podía dominar a la bestia que bramaba dentro de él... Todo ello, mientras sus enemigos mortales se conjuraban para acabar con ambos.
En Cómo seducir a un guerrero, Karen Marie Moning (KMM para las amigas) nos cuenta la historia de Grimm, el amigo melofó de Hawk, protagonista de Nieblas de las Highlands. Todas nos quedamos con ganas de ver qué pasa con ese chaval estupendo, guapetón y con sentido común, y Karen nos da alguna pista al final del otro libro, dejando la puerta abierta a una nueva historia protagonizada por Grimm. Y nosotras más que encantadas.
Gavrael/Grimm frunciendo el ceñoñjñashñgkjasñdhsñs |
Lo mejor de esta novela son dos cosas: la primera, que la parte mágica no tiene que ver con viajes en el tiempo ni con presencia del mundo fae, sino que se adentra en la leyenda sobre los Berserkers, temible raza de hombres que se convierten en auténticas fieras si se les provoca. Grimm, que realmente se llama Gavrael como descubrimos al principio en el prólogo, vive atormentado por eso y por algo que presenció a los quince años, por lo que decide renunciar a su naturaleza, huir de su hogar y cambiar su identidad. Eso mola, no me digan que no. La segunda cosa buena es que la chica y el chico destinados a estar juntos ya se conocen de antes y tuvieron "algo" que quedó en nada años atrás porque él se fue sin dar explicaciones... Al menos fue nada en apariencia y sólo para Grimm, ya que la protagonista, Jillian St. Clair, que no es una Pichote como Adrienne (la de Hawk), tiene claro que a quien quiere desde que era una cría es al chicarrón indomable y se lo tiene que llevar al huerto sí o sí, porque en el fondo de su corazón sabe que Grimm siente algo por ella (un flashback nos mostrará un momento ciertamente ñadsjfhañshgdsñadjkfs). La oportunidad para conseguirlo la tendrá cuando su padre, harto de que su hija esté soltera y entera, le meta por los ojos a tres maromazos para que decida con quién casarse de una puñetera vez ya: Ramsay Logan, Quinn de Moncreiffe (el melofó de esta novela, lástima que no tenga historia propia en otro libro) y Grimm Roderick. Analicemos el menú maromial que tiene ante sí Jillian: en el caso de Ramsay, llamarse así ya nos da una pista si las lectoras son fans de Canción de Hielo y Fuego; nada bueno puede esconder un tío con ese nombre. Por su parte, Quinn es guapo, amigo de Grimm a pesar de todo lo que sabe sobre él y de estar enamorado de Jillian, adorafollable hasta decir basta. Y Grimm es Grimm, claro. Los encuentros entre él y Jillian son explosivos, porque el guerrero le dice mil y una perrerías para apartarla de su lado, mientras que ella se pica y sale siempre rabiando. Y ambos están que se follan encima desean irremediablemente cuando se ven.
Poco calorreo, pero efectivo. El sello de KMM. |
Como he comentado, Jillian no es una pava en huevos y KMM no nos va a hacer esperar hasta que haya bodorrio para que tengan un encuentro bestial que deja el comedor patas arriba y a nosotras con los ovarios hechos cisco, claro. ¿Y ahora qué? Nos preguntamos. Si ya hay tema, todo está claro entre ambos y han frungido, ¿qué queda aún por pasar si estamos a poco más de la mitad de la novela? ¡Pues muchas sorpresas que no voy a contar! Porque Grimm sigue siendo un inseguro, Jillian una cabezota que quiere ser su mujer sí o sí, el padre la quiere casar como sea y los malos malosos están al acecho para acabar con el que consideran el último Berserker, una raza que merece ser extinguida del planeta.
KMM va madurando poco a poco y a través de toda esta serie su propio universo highlandero, documentándose en los mitos antiguos para crear historias que son románticas y con su toque de fantasía. Todo esto tiene su complemento en la serie Fever que ya hemos comentado por aquí. Sin ser para mí la maravilla de Lisa Kleypas o de Laura Kinsale, Karen ha sabido hacerse con una legión de fans gracias a sus historias diferentes, sobrenaturales y con bastante sentido del humor.
Así que esta segunda entrega de la serie Highlanders merece en nuestro Gandymetro...
Queremos un Berserker en nuestra vida y en nuestra cama |
Grimm es un personaje adorable en la novela de Hawk y reconozco que su historia, con su leyenda, me gustó bastante.
ResponderEliminarEs cierto que KMM no tiene un sello especial que la haga estar a la altura de Lisa Kleypas, por ejemplo, pero tiene un universo propio tan fantástico que, si te atrapa, no puedes dejar de leerla.
Genial reseña! Como todas las que haces, Cassie!
Besotes!
Adrienne jajaja, señor que cabezona y sin sentido ú.ú
ResponderEliminarAy omá lo del comedor fue brutal de la muerte mortal!!!! o.o
Las comparaciones son odiosas y la Kleypas está en otro rollo, pero la Karen se lo sabe montar muy bien =D a ver si no tardo mucho en ponerme con el siguiente porque parece que voy a uno por año, juas,juas ;P
Muuuaks ;-****