Como una de las famosas más odiadas, estoy acostumbrada a la atención no deseada. Pero cuando me desperté una mañana y vi que un hombre misterioso había entrado en mi casa, me di cuenta de que necesitaba seguridad y rápido. Ahí entraron "Los ángeles", mis tres guardaespaldas exmilitares.Glen, el amoroso escocés de cicatriz en la cara y dulces manos.Kenta, el soldado de pelo largo, piel tatuada y reservada sonrisa.Y Matt, el líder de ojos azules y mal carácter perseguido por su pasado militar.Tener a tres guapos hombres protegiéndome siete días a la semana y veinticuatro horas al día suena como un sueño hecho realidad pero acaba siendo una pesadilla. Siempre están aquí, vigilándome. Preocupándose por mí. Protegiéndome. Me dicen que los ignore y haga mis cosas pero no puedo ni pensar con ellos tan cerca. Las chispas son demasiado intensas.Además, no nos llevamos bien. Creen que soy una diva muy exigente. Creen que soy una drama queen. Cuando un viaje a Estados Unidos hace que el instinto protector de los hombres se dispare, la tensión entre nosotros estalla y acabo conociendo el secreto de mis guardaespaldas: me desean. Todos ellos.Mientras tanto, el comportamiento de mi acosador es cada vez más alarmante. Me fotografía a través de ventanas y me sigue en la sombra. Con el inminente estreno de mi próxima película, ¿podrán mis guardaespaldas mantenerme alejada de sus garras? ¿O se saldrá con la suya?
Estaba yo ya llegando a la saturación más extrema de pueblitos
encantadores, así que
decidí darme una vuelta por Kindle Unlimited a ver si había algún
guarrerismo bueno para quitarme y me encontré con esta autora que no te da tríos,
¡te da cuartetos!
Lo de Lily Gold es el Twister guarreril |
Con esa portada te piensas tú que es una rom-com y mis ovarios son dos campanas: Además, te dicen que es spicy y NO, nada de picantonismos andrespajarianos, esto es un libro de mucha gente *ollando junta. En concreto, de una actriz acosada, Briar Saint, y los tres guardaespaldas que contrata, Matt, Glen y Kenta, que le van a guardar la espalda, el xixi y todo el resto del cuerpo cuando a Briar la acose un fan loco que incluso llega a meterse en su casa. Al principio, como no va a ser empezar el prólogo y sacar el nardo al aire, el libro se llena de suspense (bueno, un poco tal que así, que esto no es uno de Sandra Brown) porque a Briar la acosa un pirado total y Matt, el líder del grupo de guardaespaldas de picha alegre, se toma muy en serio la protección de la muchacha, sobre todo porque está el hombre medio traumado desde que torturaron a sus compañeros bajo su mando (estos muchachos han salido de un libro de Pamela Clare y se han dado al guarrerismo porque bastante han sufrido ya). Total, que Matt está traumado y Briar asustada pero ni los traumas ni los sustos les impiden sentir cositas en los bajos. Y dónde entran los demás, dirás tú. Pues en el xixi de Briar porque a ella, como a nosotras, LeCaben todos.
Briar es una chica lista |
La atracción más desarrollada es la de Briar y Matt (que, además,
son los que más tardan en liarse), así que no veía yo cómo iba a poder ir
la cosa con los demás. Además, ilusa de mí,
pensaba que eso de estar asustada por el acosador podría no dejarte
ganas de folletisco pero no, a Briar le relaja el chingoneo y la relación con los otros dos es tal
que así:
-¡Oye, tú, traumado por tu cicatriz! Duerme conmigo, que tengo
miedo.
-Venga, vale. Que tú no lo sabes pero has sido mi actriz favorita
desde siempre.
-Ois, qué guapo eres, méteme mano para dormir más tranquila.
-Venga, vale.
-¡Oye, tú, chico mono de aspecto oriental! También eres muy mono
aunque pareces un poco tímido.
-Sí, es tímido y un poco sumiso.
-¿No me digas? Pues nunca he dominado yo a un hombre. Túmbate, que te
voy a hacer cositas.
-Venga, vale, que yo no digo nada pero también me pongo palote
contigo, aunque palote discreto.
-Pues nada, si os hace, primero de uno en uno y luego un trío. ¿Le
importará mucho a Matt, que ha sido el primero en mirarme con
follaojos?
-No te preocupes, que se acabará uniendo porque la vida del militar
es muy dura pero nuestras colas, más, y ya tenemos experiencia en
hacer cuartetos y no de cuerda, precisamente.
Muerta me quedo |
Resulta que estos tres lo han pasado muy malamente cuando estaban por ahí
y ya se han acostumbrado a que,
si hay moza y esta se presta, se la trincan todos a la vez. Pero sin cruce de boas, que se quieren pero no tanto. Así que hay sexo
en pareja, en trío y en Twister cuarteto
pero no boa/boa, ¡que no nos falte de ná! Eso sí,
a pesar de ser descriptivo, no lo he visto muy hot, lo he visto más bien como algo mecánico y ortopédico (será lo
normal cuando hay tanta gente en una cama y no hay demasiado sitio donde
toquetear, que hay que ir organizadito).
Tampoco lo veo yo para escrupulosas, porque por ese xixi pasan casi
a la vezz más boas y bocas que por la silla de un dentista.
Así de moñeca nos dejan estos a Briar |
Como hay mucha gente y al libro se le pretende dar algo de chicha, la
escritora intenta mezclar el suspense con tres historias de atracción
sexual, guarrerismo y amor y, mira,
tanta mezcla ni en un smoothie, porque al final no se puede desarrollar nada bien.
El suspense es lo más logrado
de todo (y eso que no es gran cosa) pero, cuando se resuelve, lo hace de
un modo muy rápido. La atracción sexual es regulera, aunque con
Matt es algo más resultona. Los guarrerismos ya os he dicho que más
metesaquiles guionizados que otra cosa. Pero el amor...
Madredelamorhermoso, un desastre total.
El amor surgiendo entre estos cuatro |
Para colmo de males, la protagonista es insoportable, con lo que tú
lees pensando que por qué no la mandan a tomar viento estos tres
mozalbetes y se van contigo, que si no te trincan lo mismo te planchan la
ropa.
En fin, que
el invento guarreril no ha salido especialmente bien pero reconozco
que me han dicho que esta mujer los tiene mejores y ya tengo preparado
otro para cuando necesite mucho nardo alegre, que para pasar bien el
invierno nada mejor que una cama llena de maromazos.
Por todo esto, se lleva en nuestro Gandymetro...